Para saber si estamos ante un buen producto es necesario probarlo previamente. La cata de jamón nos permitirá comprobar su calidad de forma muy sencilla, a través de su aspecto visual, su textura, su olor y su sabor.
A las personas nos gusta, por naturaleza, probar previamente lo que vamos a comprar para aseguramos el buen estado del producto que estamos a punto de adquirir. Con el jamón serrano e ibérico ocurre lo mismo y, por eso, hoy vamos a enseñarte en qué indicadores debes fijarte al realizar la cata.
Indicadores claves para realizar la cata de jamón
- Su aspecto: el color de las lonchas se debe a un pigmento que existe en bajas cantidades en el cerdo, denominado mioglobina. Además, cuando se incrementa la concentración de sal se producen alteraciones químicas que son las responsables del color rojo durante la curación.
El color ideal de la loncha debe ser entre rojo púrpura y rosa pálido, así como brillante, debido a la grasa que las cubre. Además, el vetado también tiene que estar presente a simple vista.
- Su aroma: su olor dependerá de diversos factores como la alimentación que hayan tenido los cerdos o las condiciones ambientales de la curación. El aroma tiene que ser intenso, agradable y equilibrado y para percibirlo se deberá emplear el olfato y el gusto.
- Su sabor: podemos establecer tres variables: dulce, amargo y salado. La parte dulce la otorgan diversos elementos, como alcoholes y derivados de azucares; la parte amarga no debe ser excesiva ya que podría obedecer a una reducción de tiempo en el proceso de curación o su elaboración a una temperatura excesivamente baja; el punto de sal debe ser intermedio.
- Su tacto: las lonchas deben ser resbaladizas por la presencia de la grasa. En la parte magra, hay que observar aspectos como la fibrosidad, la jugosidad al masticarlo, y la dureza (ni demasiado duro ni demasiado blando).
Ahora que ya sabes cómo debe probarse, te esperamos en Jamón Every Body para que descubras nuestros jamones de primera calidad.